Es una realidad que la mayoría de niños mayores de 12 años, tienen un móvil smartphone en sus manos, lo que al parecer ha hecho que los conflictos por uso del móvil sean parte del día a día en muchos hogares. Una pena, de verdad, pero es que tendemos a dar por cierto que como son «nativos digitales» entonces «el móvil es una extensión de sus brazos», y que «poco podemos hacer».

O bien nos ponemos de los nervios y nos rasgamos las vestiduras, o simplemente nos damos por vencidos y entramos al trapo y en un bucle de conflictos por uso del móvil, en lugar de trabajar en unos acuerdos que nos ayuden a prevenir.
Cuando escucho a los adultos decir esto, me corre un escalofrío por todas partes, porque lo primero que pienso es en que han sido ellos quienes han puesto ese dispositivo en las manos de sus hijos. Nuestros hijos, por fortuna y natura, aún no nacen con el móvil pegado a las manos, somos los adultos quienes se los damos.
Teniendo esto bien claro, entendiendo que somos los adultos responsables de la crianza los que tenemos a bien supervisar y determinar los usos (y abusos) que se darán a ese nuevo dispositivo digital, quiero compartir una serie de pautas que me han servido como madre, para evitar y prevenir que «el móvil sea la extensión de las manos de mi hijo adolescente
El móvil no es un regalo es una herramienta que yo pago
Una de las recomendaciones que nos dan los grandes expertos en uso responsable y seguro de los móviles por parte de los menores de edad, es que entiendan que no se trata de un juguete, o una videoconsola… es una herramienta de comunicación y ocio, a la que tienen acceso, gracias a que los padres «pagamos un plan de datos y una línea», por lo que muchos de estos expertos, opinan que tampoco debería ser vista como un regalo.
Con la liberación de los contratos de datos, el tema de los smartphones en manos de menores de edad, seguro va a tener un giro. Ya no es lo mismo esa tarifa plana que estar pendientes de no usar qué apps en qué momentos, o de no ver el vídeo, o de dejar el skype sólo para cuando estás en casa conectado a la wi-fi. Por eso es importante recalcar este asunto… como no es un regalo, no es un juguete, y tiene unos costos y unas responsabilidades civiles de uso detrás.
Límites consensuados para evitar conflictos por uso del móvil
Que sí, que hay que lograr establecer límites consensuados en cuanto a la cantidad de tiempo, el tipo de apps que se podrán descargar, el uso de los paquetes de datos, los contactos, etc. etc…
Negociar a través del diálogo y la mediación, para lograr acuerdos que satisfagan a todos. Por ejemplo, nosotros tenemos acordado que NINGUNO de nosotros hace uso de los dispositivos digitales en la mesa, ni cuando estamos en un restaurante… NO, NUNCA, MAI, JAMAS… ese es para nosotros un acuerdo de uso consensuado y aplicado a todos en la familia (el ejemplo, aquel maravilloso cómplice de la crianza).
Otro limite que tenemos impuesto, para todos, es que los dispositivos digitales se APAGAN antes de ir a dormir y se dejan en la zona de carga, que es lejos de nuestras habitaciones. (esto además por un tema de facilitar la conciliación del sueño… )
Y por último, que los padres tenemos derecho (y la obligación) de revisar periódicamente el uso que está dando a su dispositivo. Ya sea por medio de un programa de control parental (como el que tenemos) o bien acompañado por él mismo mientras lo revisamos (ojo, que no es espiar ni violar su privacidad, no entramos en el detalle de la conversación ni mucho menos, pero si de ver y supervisar).
Acuerdos establecidos en un contrato de uso
Una de las grandes herramientas que nos recomiendan los expertos, es tener un contrato de uso… y al respecto, les invito a seguir leyendo la colaboración que he hecho con Teresa, del blog Mum & Teens, en la que les cuento los «porqués y los cómo» de este tipo de contratos que son esenciales para poder actuar desde la prevención del conflicto.
El blog de Tere, está especializado en adolescencia, desde un enfoque muy positivo y constructivo, por lo que me encanta poder colaborar con ella. Creo que la adolescencia es una de las etapas más estimulantes como padres, y menos favorecida por el enfoque tremendista que se le suele dar, y es por eso que les recomiendo seguir a Teresa Rey en Mums & Teens, porque precisamente ella buscar cambiar esa cara negativa y mostrarnos las bondades y retos que supone, ser madre de adolescentes.
Espero que lo encuentres de utilidad…
Fotos de Priscilla Du Preez ,Clem Onojeghuo y Jacob Ufkes on Unsplash