En la #VueltaalCole di #NoalAcoso escolar #stpobullying
Quienes me siguen saben que es un tema que me ha tocado de cerca y con el cual me siento comprometida, independiente al hecho de haberlo superado a nivel personal y familiar.
El acoso escolar desafortunadamente sigue en aumento. Y en gran parte se debe a la toma de conciencia por parte de padres y madres, y el hecho de estar ante campañas que permiten que tanto los alumnos como los centros educativos, puedan identificar y exteriorizar este flagelo. Las estadísiticas son aterradoras, un 44% de los escolares españoles han sido víctimas de algún tipo de maltrato en el ámbito escolar (ver noticia)
No me cansaré nunca de decir, que este es un fenómeno que pone de manifiesto la continua legitimización y normalización de la violencia entre coetáneos... Cuantas veces hemos oído decir (o hemos dicho) «son cosas de niños». El problema es que estas «cosas de niños» luego se vuelven «cosas de adultos» y quienes son acosadores de pequeños, generalmente son abusadores de mayores, bien sea en el trabajo a través de mobbing, o en sus hogares ejerciendo violencia física o verbal con sus parejas e hijos. Lo dicho… la perpetuación de un modelo de violencia.
Este curso mis hijos comienzan en un colegio nuevo y en gran medida ha sido para evitar continuar en un ambiente en el cual el bullying o acoso escolar sigue siendo visto como «cosas de niños». En contraste, esta decisión de cambio los pone en una situación mucho más vulnerable, si el entorno y sus compañeros no están sensibilizados con el tema. Ser nuevo no es fácil, y se puede llegar a ser víctima de la situación.
Esta semana Lucia Etxebarria compartió en facebook este cartel de una asociación, cuyo texto quiero comentar: Es un llamado a todos los padres y madres para que enseñen a sus hijos a ser empáticos con los nuevos compañeros. Ser nuevo no es fácil y nos sucede también a los adultos, de hecho hasta en las redes sociales, y una sonrisa o una frase amable siempre pueden hacer la diferencia. Ser generosos y enseñar a nuestros hijos a serlo con otros es una forma de ayudar a construir un mundo más sostenible y amable. De aquí la importancia de hablar con nuestros hijos y explicarles lo difícil que es para un niño nuevo, hacerse un lugar en el nuevo espacio.
Ayer tuvimos un encuentro con los nuevos padres, y curiosamente, muy pocos rompimos o intentamos romper el hielo; a todos nos paraliza el miedo, y muchas veces las reacciones para ocultar ese miedo pueden llegar a ser agresivas o antipáticas; no dejemos que nuestros miedos paralicen a nuestros hijos y les convierta en generadores de actitudes hostiles. Hablemos con nuestros hijos, enterémonos del tema, hagámoslos partícipes y no demos la espalda a este problema.
Me uno al llamado de esa asociación, para que padres, madres y en general familias, ayudemos a que el acoso escolar no encuentre cabida, al menos no en nuestros entornos mas cercanos.
Y quiero recordar una frase de otro post relacionado:
«la empatía y el respeto como base de una sociedad inteligentemente sostenible, que no se muestra apática ante las injusticias ni el acoso.»
Enlaces Relacionados:
- Acoso Escolar: Cáncer Silencioso de la Sociedad
- Poner freno al Acoso y al ciberacoso escolar
- #Acosoescolar y «No es juego de niños»… cuando te toca lo entiendes.
- Ser empático o apático… esa es la cuestión
- Asociación No al Acoso escolar (España)
- RedPapaz (Colombia) Kit Intimidación escolar
- Stop Bullying (USA)
- Informe Cisneros VII sobre Acoso Escolar:
Cuanta razón tienes y la verdad es un post que hace falta. Ahora mismo comparto el cartel en twitter, con tu permiso.
Gracias kira… tenemos que abrir los ojos y estar atentos a cualquier "síntoma" para poder en realidad frenar y erradicar este cáncer. Cuanto mas se conozca más fácil será prevenir.
Estoy totalmente de acuerdo contigo. Tengo un sobrino de 9 años y el año pasado un niño mayor no paraba de meterse con él. Un día, ese niño cogió un ladrillo (que todavía no sabemos qué narices hacía un ladrillo en el patio de un cole donde hay niños pequeños) y se lo tiró a la pierna con la consiguiente herida, sangre… y demás. Cuando mi cuñada fue a hablar con el jefe de estudios, porque el director se había ido a su casa, la respuesta que le dio es que eso son cosas de niños. Claro, mi cuñada os podéis ver cómo se quedó y la que montó. De vergüenza, que la respuesta de un jefe de estudios sea esa.
Pobre… pues tiene justo la edad de mi niño Mayor 🙁
Me indigna sobre manera que la respuesta de una institución educativa sea tan vaga y tan equívoca, cuando son precisamente ellos quienes debería estar más informados y preparados para detectar y frenar este problema. Espero que este curso las cosas mejoren para tu sobrino, de todo corazón.