El domingo pasado El Mayor (2004) hizo su primera ida «solo» al centro comercial de nuestra urbanización, para ir por el pan en bicicleta… le hacía mucha ilusión! Aunque lo que hicimos fue una negociación, y yo fui detrás suyo, y se hizo a la idea de que iba solo… (pero bueno, esos detalles están en otro post).
La cosa es que mientras yo estaba aparcada esperando que saliera de la panadería, se me acercó un amiguito suyo a saludarme; me preguntó que yo que hacía allí, y le expliqué la negociación con mi hijo, y que yo le estaba acompañando en la distancia, para que él pudiese venir solo por el pan, a lo que me respondió:
Bah, que suerte tiene (el nombre de mi hijo), mis padres nunca tienen tiempo ni para acompañarme por mis cromos, así que vengo yo solo!.
Se me partió el alma!. Debo decirles que aunque, gracias a esto de la blogoesfera, mi tolerancia ante las diversidades frente a la crianza se ha ampliado, cuando me enfrento a situaciones como ésta, no puedo dejar de sentir tristeza… si me duele mucho que algún niño pueda sentirse triste porque sus padres no tienen tiempo para él/ella; me parece duro y poco sensible que la sociedad actual permita que los peques sientan ese vacío…
Y me pregunto, si no estaremos haciendo algo mal, porque que un niño diga y sienta ese vacío no lo veo como algo positivo, estamos ante niños que crecen solos a pesar de estar acompañados, y niños que ven en ciertas actitudes, que no son importantes..
Esta fue la viñeta mas comentada en las redes durante los pasados Reyes Magos…
A veces nos olvidamos que lo que mas necesitan nuestros hijos es tiempo con nosotros…
Desde que tenemos a nuestro pequeño saltamontes he pensado en realizar diversos cambios para ampliar esos momentos con mi hijo. De momento he ido haciendo varios, pero todavía, aun teniendo suerte por mi jornada, quiero seguir ampliándolos. Es sin duda complicado, pero es también mi mayor deseo. Verlo crecer y ser parte activa de su vida.
Realmente triste. Es tan necesario que seamos nosotros, los padres, quienes seamos conscientes de que lo que más necesitan es nuestro tiempo y compañía… Qué difícil en esta sociedad donde prima el dinero por encima de todo, y en unos empleos que nos absorben. Suerte que cada vez somos más los que luchamos por conseguir ese tiempo y "estamos", que no es poco…
Yo reduje mi jornada de trabajo y por lo tanto mi sueldo, para poder estar con mi hija; y aunque me dan (sin pedirlas) muchas opiniones sobre la de opciones q tengo para dejarla mientras yo curro (guarderia privada, padre, etc) parece que no entienden que yo lo que quiero es crecer con ella. Es triste conocer casos asi, como el que nos cuentas, porque es el mismo niño el que te expone su situacion.
Es muy triste que un niño se sienta tan solo…
Yo tengo que trabajar, pero aun así, puedo pasar todas las tardes con él. Esta semana por ejemplo tengo varias revisiones médicas y trabajo una tarde, y ya me estoy sintiendo mal porque voy a faltar 3 tardes, y eso que se queda con mi madre pero no puedo evitar sentirme un poco mal…